Cartilla practica de construccion naval
Timoteo o´Scanlan
Caballero de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo
Capitán de Fragata de la Armada
IX CLASES DE MADERAS. La madera de roble sirve con mas particularidad para el casco de los buques, sus miembros, baos y curvas de cubiertas de toda especie; en una palabra, para todas las piezas esenciales del casco, y por lo mismo es la madera de roble la que con propiedad se llama de construcción; se distingue en derecha y de vuelta. La madera derecha de roble se invierte en piezas de quilla, caperoles, codaste, baos, bitas, cruz de estas, madres ó mechas de timón y cabrestante, cañas de timón, fogonaduras, guindastes, parte de sobrequilla, zapata, tablones, cintas, excepto las cuarteles de proa, durmientes, &c. De la madera de vuelta, se forman las ligazones de las cuadernas, las cochinatas, ligazones de escoben, genoles de fondo y de revés, las buzardas, curvas del cuadro de popa, de cubiertas y alcázar y castillo, roda, yugo principal, varengas del fondo ó bulárcamas, &c. Cuando se cortan y labran las diferentes piezas de madera, tanto las derechas como las de vuelta, se marcan con sus respectivas señales, que indican la clase de buques a que corresponden las dimensiones. La madera de pino, particularmente la del Norte, se emplea en la construcción de la arboladura, y la de esta clase que, por sus cortas dimensiones no sirve para aquel objeto, se asierra en tablones y ta-blas, y se emplea en entablar los sollados y otros entarimados de la bodega, en falsos baos, barrotines, mamparos, pañoles, galerías del sollado, tablones de la obra muerta del buque; y para toda obra de carpintería de blanco. Los varios pinos de España pueden tener distintas aplicaciones según su calidad, y con ellos se pueden ejecutar todas las obras en que se emplea el pino del Norte, excepto las perchas para arboladura: por lo tanto se sirvió S. M. mandar por Real orden de 24 de Abril de 1828 no se consumiesen en sus arsenales otras maderas que las del país, a no ser las expresadas perchas. Los de España sirven para pescantes de amura ó serviolas, tacos de escoben, contretes, &c; y los de vuelta para ligazones de revés de corbetas y otras embarcaciones menores. La de tejo, sabino y álamo se emplean, las dos primeras en la escultura, y esta última en ejes y ruedas de cureña, madres de cabrestante, cañas de timón, &c. La de olmo en montantes de bóveda, batayolas, tojinos, motonería, &c., y algunas veces en ligazones de revés de embarcaciones ligeras. La de cedro, en las obras muertas del casco, tanto por su ligereza, como por su propiedad de no astillarse con los balazos; mas en los buques fabricados en América se emplea el cedro a causa de su abundancia y falta de pinos, hasta en las ligazones, advirtiendo se les da mayor grueso a las piezas con el fin de proporcionarles mayor resistencia. La de haya en remos, espeques y alzaprimas, habiéndose empleado con buen éxito en el Departamento del Ferrol para tablonería exterior de fondos, por su mucha duración cuando está sumergida en el agua, como se ha visto en los baos de esta madera que forman el pavimento del dique de aquel arsenal, pues habiéndose reconocido el año de 1827, se hallaron en tan buen estado como el día que se pusieron. La de fresno, por lo general, en cureñaje, excepto los ejes y ruedas. La de nogal y la de caoba en muebles y utensilios; y la última en caños de bomba. La de encina verde en cabillones, cabillas, &c. La de guayacán ó palo santo en roldanas de motones. …/… |